1x10 "Despertando al ángel negro" (1ª Parte)

Cristian y Raquel se encontraban en casa de ésta última, colocando los adornos navideños al árbol. 

RAQUEL: Mañana por fin el último día de clase…
CRISTIAN: Pues sí, no sabes las ganas que tengo.
RAQUEL: Entonces… ¿qué querrás para comer hoy? 
CRISTIAN: Lo que tengáis, no me apetece molestar.
RAQUEL: No, si no es molestia simplemente la tendremos que hacer entre los dos porque mis padres se han ido a visitar a mis abuelos. 
CRISTIAN: Pues… a mí se me dan de lujo las pizzas.
RAQUEL: ¿Ah sí? Pues venga, manos a la obra.
CRISTIAN: Necesitaré harina, levadura, aceite, sal y agua. Y luego, lo que quieras se lo ponemos por encima.
RAQUEL: No tengo nada de eso, excepto la sal, el agua y el aceite así que… Tendremos que ir a comprar juntos. (Le coge de la mano y le conduce hasta la puerta)
CRISTIAN: (Se para en seco) Cariño… Esto… Deberíamos decirles a los demás que estamos saliendo.
RAQUEL: Pero, ¿por qué?
CRISTIAN: Porque como estamos saliendo ya de verdad, pues no sé… habría que decirlo.
RAQUEL: Sí tú quieres… Mañana ya se los diremos a todos.
CRISTIAN: No, no, si tú no quieres pues nada.
RAQUEL: (Le coge de la mano y le mira fijamente) Por supuesto que quiero. (Le besa)



Manuel y Aurora estaban en un cine, al parecer viendo una película de miedo.

AURORA: ¡Pero no vallas por ahí! Que tonta es de verdad… Madre mía, ¡¡Qué te van a coger sí vas por ahí!! (Coge una palomita y se la lleva a la boca)
MANUEL: Aurora, por favor, baja la voz. Que nos van a echar la bronca.
AURORA: Uy, perdón. Es que siempre que veo una película me meto mucho en el personaje.
MANUEL: Bueno, lo importante es que estés bien; que el otro día casi me haces llorar, de verdad que no puedo contener la llorera cuando la gente cuenta dramas…
AURORA: Tranquilo, eso ya pasó. ¡¡Ahh!! Será tonta la tía. Ya le dije que no fuera por ahí.

Judith se encontraba en su cama mirando al techo y pensando en cómo todas sus sospechas se habían confirmado. La única persona en la que de verdad confiaba le había demostrado que estaba con ella por interés, y que era él quien la había robado los 200 euros. Acto seguido, decidió levantarse e irse a su ordenador portátil, estaba en una situación rara, no lo conseguía entender. En el ordenador, el nombre de Kevin aparecía disponible.

KEVIN: hola guapa
JUDITH: ahora no estoy para hablar, me encuentro mal…
KEVIN: pork?
JUDITH: mañana a la recogida de notas hablamos ok?
KEVIN: ok…

Judith apagó el ordenador y volvió a la cama a pensar en lo mismo de antes, no conseguía entenderlo.

Raquel y Cristian estaban en la cocina manchados de harina, cada uno hacía su pizza para comer, amasaban los ingredientes a la vez, Raquel movió la mano para coger sal pero Cristian hizo exactamente el mismo movimiento, se entorpecieron el paso y Raquel le dejó a Cristian que la cogiera. Luego se miraron y sonrieron. Después, volvieron a amasar.

RAQUEL: Mañana son las notas, ¿no tienes ganas?
CRISTIAN: ¿Ganas de ver como suspendo todas? No, gracias.
RAQUEL: No digas eso, hombre. Seguro que apruebas más de una. 
CRISTIAN: Claro… como tú en todo sacas notables, pues…
RAQUEL: Y tú en educación física sacas sobres y yo bienes así que…
CRISTIAN: Cada uno es lo que es. Jaja.
RAQUEL: Sí y tú tienes un cuerpazo… (Lleva sus manos a la cara de Cristian y le mancha)
CRISTIAN: Ahora no, tenemos que hacer la comida.
RAQUEL: Después de comer, ¿eh?
CRISTIAN: Después de comer te embadurnaré de mermelada y te iré lamiendo hasta llegar a la boca. ¿Qué te parece?
RAQUEL: (Bromista) Me parece un buen plan para merendar. Jajaja. (Le besa tiernamente)

Ixchel y Álvaro estaban paseando para ir juntos a casa, cuando llegaron a casa de la joven, Álvaro quiso despedirla, pero algo le hizo hacer lo contrario.

ÁLVARO: Ixchel, no consigo dormir.
IXCHEL: ¿Por mí? Jajaja, tranquilo, es lo que tiene estar enamorado.
ÁLVARO: No, por ti no, por Raúl. Es que no paro de pensar en él…
IXCHEL: Sí, es cierto, lo que vimos hace unas semanas nos ha dejado un poco raros…
ÁLVARO: No sé… Pero a ese tío hay que meterle presión, mandarle anónimos para acojonarle y hacer que confiese… Hay que hacer algo.
IXCHEL: Tú estás loco. El otro día casi nos pillan, y si encima es un asesino y le mandamos anónimos, pues…
ÁLVARO: Yo lo voy a hacer, si tú no quieres te vas con tu amiga Judith…
IXCHEL: Venga, vale. (Abre la puerta con sus llaves) Vamos a mi habitación.
ÁLVARO: Vale. (Sube las escaleras) ¿Y tus padres?
IXCHEL: Se han ido de vacaciones románticas…
ÁLVARO: Pues qué bien, así estamos solos.
IXCHEL: No voy a hacer nada contigo.
ÁLVARO: Digo para la investigación.
IXCHEL: (Hace como si nada) ¿Cojo el portátil?
ÁLVARO: ¿Si no como piensas mandarle los anónimos?
IXCHEL: Pues no tengo Internet, así que se lo tendremos que mandar en una carta.
ÁLVARO: Bueno… vale. De todas maneras, no teníamos su correo electrónico.
IXCHEL: A ver, ¿qué le ponemos?

Cristian y Raquel estaban comiendo una tortilla a la francesa, al parecer, la pizza no les había salido como esperaban.

RAQUEL: Tanto desmadre para nada…
CRISTIAN: Por lo menos nos lo hemos pasado bien. Jeje.
RAQUEL: Sí, pero luego tendremos que limpiar todo esto.
CRISTIAN: Sí, pero después de merendar.
RAQUEL: (Bromista) Déjame terminar este trozo de tortilla o qué.
CRISTIAN: Voy a por la mermelada.
RAQUEL: (Se termina el último trozo de tortilla) ¡Allá voy! 

Raquel fue corriendo hacia Cristian y se subió a sus lomos, fueron hacia la cama y el joven empezó a quitarle la camiseta a Raquel, luego los pantalones y la fue untando de mermelada. Le quito el sujetador pero no le puso mermelada.

RAQUEL: ¿No me pones mermelada aquí?
CRISTIAN: No es necesario poner mermelada ahí, porque tú ya estás buenísima. (Comienza a lamerle todo el cuerpo y le quita las bragas)
RAQUEL: (Le quita el calzoncillo) ¡Venga Cristian! ¡Ohh, ohh! ¡Síí!
CRISTIAN: Qué buena estas, dios…

Álvaro terminaba de escribir el anónimo y lo imprimió, entonces lo empezó a leer para ver si estaba bien.

ÁLVARO: “Raúl, sabemos lo que le hiciste a Lucía Alcázar. Si no quieres que las cosas empeoren, confiesa ahora que estás a tiempo”
IXCHEL: Nos va a tomar por el pito del sereno…
ÁLVARO: ¿Por qué? Si él hizo lo que creemos, no se andará con tonterías.
IXCHEL: ¿Y por qué se lo diga un anónimo ya va a confesarlo todo?
ÁLVARO: Bueno pues entonces, ¿qué hacemos?
IXCHEL: Da igual, déjalo así. Pero, ¿y cómo hacemos que lo vea? ¿Dónde se lo ponemos? 
ÁLVARO: Pues… Mañana con todo el lío de las notas perderá de vista su maletín…
IXCHEL: Pero si no se separe de él ni para cagar. Más que un maletín parece una lapa.
ÁLVARO: Que sí, que seguro que tenemos una oportunidad. Y si no pues en el parabrisas de su coche.
IXCHEL: No se, es que se te ocurren cosas muy raras. A mí no me convece…
ÁLVARO: Mira tía, haz lo que quieras. Si todo te va a parecer mal yo me piro. (Coge su chaqueta y sale dando un portazo)
IXCHEL: (Después de que se vaya) Se dice adiós…


Pasa la noche, es la entrega de notas. Todos los alumnos del Zurbarán acuden a sus clases para recibirlas, todos los profesores de 2º de Bachillerato están allí. Manuel comienza a decir unas palabras.

MANUEL: Muy buenos días, finaliza el primer trimestre de este segundo curso de bachillerato, y por ello os vamos a dar los resultados de vuestros estudios para los que halláis estudiado y de vuestros fracasos para los que no han movido un dedo. Nuria y Aurora os irán llamando para dároslas, mientras tendréis que esperar.
IXCHEL: (A Álvaro) ¿Y Raúl?
ÁLVARO: (A Ixchel) Pues no sé, pregunta.
RAÚL: (Entra por la puerta sofocado) Perdonar el retraso, es que el autobús sale un poco tarde.
ÁLVARO: (A Ixchel) Ha venido con autobús… a ver donde le dejamos ahora la notita…
IXCHEL: (A Álvaro) Se lo dejaremos en su cartera.
RAQUEL: (Cogida de la mano de Cristian se levantan) ¿Podemos decir algo?
MANUEL: (Extrañado) Sí… Claro.
RAQUEL: A ver… queremos hacer pública la relación que llevo con Cristian.
KEVIN: ¡¿Con el drogadicto?! Jajaja, vamos no me jodas.
MANUEL: ¿Perdón, Kevin?
CRISTIAN: Imbécil…
MANUEL: Sentaros.
MARINA: ¿Puedo decir algo?
MANUEL: ¿Pero qué pasa hoy? Sí, claro que puedes…
MARINA: Sólo deciros que Mateo, mi novio se ha matriculado a este instituto, y al parecer irá a esta clase.
AURORA: Eloy Ramírez Aleja, por favor ven.
ELOY: (Borde) ¿Qué?
AURORA: ¿Cómo que qué? Ven a buscar las notas…
KEVIN: Pobre viudito…
JUDITH: Calla imbécil.
KEVIN: (A Judith) ¿Y a ti que te pasa?
JUDITH: (A Kevin) Ladrón de mierda…
KEVIN: (A Judith) ¿Qué dices?
JUDITH: (A Kevin) A la salida, vienes conmigo.

Finalizaba lo que era el último día de clase del año y todos los alumnos, impacientes por ver lo que había dentro de esos sobres comenzaron a abrirlos a pesar de que debían de hacerlo en casa. Algunos tuvieron gratificantes sorpresas por su duro estudio y otros disgustos que deberían de esperar por su poco estudio.

Judith muy enfadada llevó a Kevin hacia un banco de al lado del Zurbarán.

JUDITH: El otro día vi el mensaje que te dejó tu padre en el móvil…
KEVIN: (Haciéndose el loco) Pero… ¿Pero qué dices?
JUDITH: Por lo menos admítelo… ¡¿Por qué me has quitado 200 euros?!
KEVIN: (Mintiendo) No sé de qué me hablas…
JUDITH: (Saca el móvil y busca el mensaje del padre de Kevin) De esto te hablo, de esto. (Le muestra el mensaje)
KEVIN: Judith, entiéndeme…
JUDITH: No, no consigo entender como tú, la única persona que creo que me quiere es capaz de hacer eso… ¡No es por el dinero! ¡Es por el hecho de que me has estado engañando y utilizando todo este tiempo!
KEVIN: Mi padre…
JUDITH: ¡¿Tu padre qué?! ¿No tenía tanto dinero?
KEVIN: La empresa de mi padre está pasando por apuros económicos desde hace meses. En un acto de desesperación, le pidió un préstamo a unos tíos que no son de fiar. Ahora sus beneficios no han aumentado y tiene que devolverles la pasta. Me la pidió a mí, pero me gusté gran parte de lo que tenía en aquella pulsera que te compré cuando nos reconciliamos.
JUDITH: ¡Ya, pero es que no consigo entenderlo!
KEVIN: Ni yo, no sé como fui capaz…
JUDITH: (Lloró) Kevin, ¿tú me quieres?
KEVIN: (La cogió de las manos) Claro que te quiero, pero tienes que entenderme, mañana si quieres te compro un reloj de 200 euros para que pongas celosas a todas las del insti, pero ahora no me dejes, por favor…
JUDITH: (Se quitó las lágrimas) ¡No! Estoy harta de tanto dinero, parece que nuestra relación se centre en lo material y no en el amor, como debería ser…
KEVIN: Venga, esta noche te vienes a mi casa y preparo una cena romántica, ¿te parece bien?
JUDITH: No. Kevin, no me parece bien… Ya no.
KEVIN: (La volvió a coger de las manos) Por favor, perdóname.
JUDITH: (Le susurró) Le vas tomar el pelo a otra. (Se fue llorando)

Ixchel y Álvaro iban deambulando por los pasillos del instituto ya que se habían quedado dentro de él para poderle dar el anónimo a Raúl.

IXCHEL: (En voz baja) Mira, están todos ahí en el despacho.
ÁLVARO: (En voz baja) Anda que… tanto chocolate y tanta cosa y a nosotros no nos dan nada…
IXCHEL: (Subió la voz) ¡¿Quieres callarte?!
ÁLVARO: (En voz baja) Shhh, creo que vienen. (La coge de la mano y la lleva a una esquina)
RAÚL: Entonces esta noche… ya sabes.
NURIA: Sí… (Le besa) 
IXCHEL: Me gustaría ser ella…
ÁLVARO: (Sorprendido) ¡¿Te gusta Raúl?!
IXCHEL: (Lo ignora) Mira, no lleva la cartera, quizá se la haya dejado en el despacho.
ÁLVARO: Pues tendremos que esperar a que todos salgan…
MANUEL: (Sale con Héctor y Aurora) Venga, vamos a tomarnos algo para celebrar que estaremos unas semanas sin estos bichos…
AURORA: Tampoco es para tanto, jajaja.
HÉCTOR: Yo mientras esté a las diez y nueve minutos camino a casa contento.
ÁLVARO: (A Ixchel en voz baja) Anda que no es perfeccionista el tío ni nada…
IXCHEL: Vamos, no creo que tarde en darse cuenta de que le falta la cartera.

Ixchel y Álvaro entraron sigilosamente al despacho del director y comenzaron a buscar la cartera de Raúl.

IXCHEL: Aquí está.

Raúl salía por la puerta con Nuria, se dio cuenta de que le faltaba la cartera.

RAÚL: La cartera, me la he dejado.
NURIA: Pues venga, que Manuel cerrará la puerta ahora mismo.
RAÚL: (Corrió hacia Manuel) ¡¡Manueeel!! ¡¡No cieerreees!!
MANUEL: Tranquilo, si aún no he cerrado…
RAÚL: (Sofocado) Gracias, espera un momento que coja la cartera, que me la he dejado.

Ixchel estaba terminaba de meter la nota en la cartera, pero empezó a oír unos pasos, cogió de la mano a Álvaro y se escondieron dentro del armario.

RAÚL: Madre mía que cabeza la mía… (Coge la cartera y se va)

Ixchel y Álvaro oyen que Raúl se ha ido y ellos salen del armario.

IXCHEL: Hala, ya hemos salido del armario…
ÁLVARO: Ahora podremos entender mejor a Eloy.
IXCHEL: Déjate de broma, por fin lo hemos hecho.
ÁLVARO: (Se quedó mirando a Ixchel) Esto…
IXCHEL: (Coge su dedo y lo lleva a los labios de Álvaro) Shhh, no hace falta que hables, tu cuerpo habla por sí mismo. (Le besa) ¿Te apetece hacerlo aquí? A mí me da mucho morbo…
ÁLVARO: (Nervioso) Esto… claro… ¿Por qué no? ¿Empiezas tú o yo?
IXCHEL: Joder tío, parece que no lo hayas hecho nunca. ¿No serás vir…?
ÁLVARO: (Nervioso) ¿Virgen? Que va…
IXCHEL: Pues entonces, venga, desnúdame, que quiero que tomes la iniciativa.
ÁLVARO: (Le desabrocha los botones de la camisa lentamente) 
IXCHEL: ¡¿Quieres hacer el favor de hacerlo más rápido?!
ÁLVARO: Ixchel…
IXCHEL: ¡Vamos!
ÁLVARO: Ixchel, soy virgen… No he follado en mi vida.
IXCHEL: ¡¿Qué me estás contando?! ¡Me has puesto calentísima! Aquí y encima con uno que es virgen…
ÁLVARO: ¿En serio?
IXCHEL: Sí, venga, lo hago yo todo.

Nuria y Raúl iban acompañándose a sus respectivas casas, Raúl despidió a Nuria.

NURIA: Gracias por traerme y hasta Enero, que yo me iré de vacaciones con mi familia.
RAÚL: De nada cariño. (La besa) Te echare mucho de menos, espero que me mandes alguna postal.
NURIA: Por supuesto, a ti la primera. Bueno, adiós que Aurora llegará pronto.
RAÚL: Hablando del Rey de Roma…
AURORA: (Llega a casa de Nuria) Por la puerta asoma, Jajaja.
MANUEL: Jajaja, bueno, yo ya me tengo que ir.

Todos se despidieron, se dieron unos besos y se fueron para sus casas. Raúl cogió su coche y fue dejar su maletín en la parte de atrás, cuando éste se cayó y se abrió. Todos los papeles cayeron al suelo y el profesor de arte se agachó para recogerlos. Entre ellos pudo ver un papel que no había visto nunca… Lo cogió y lo leyó con curiosidad: “Raúl, sabemos lo que le hiciste a Lucía Alcázar. Si no quieres que las cosas empeoren, confiesa ahora que estás a tiempo” Raúl se quedó boquiabierto y un sentimiento de furia le hizo dar un gran puñetazo contra la parte de arriba del coche.

2 comentarios:

  1. Pues ya están los 11 capítulos de la primera temporada disponibles. Ideal906090 y yo, estamos ya en fase de guiones de la segunda temporada. ¡No os la perdáis porque la estrenaremos pronto!

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